Del Burnout a la Sostenibilidad Empresarial: Un Camino de Transformación

¿Qué ocurre cuando nos detenemos y reconsideramos cómo estamos llevando nuestra vida profesional y personal?

En el mundo empresarial, la presión para obtener resultados rápidos, cumplir con metas ambiciosas y superar constantemente los números del trimestre anterior puede llevar a un desgaste profundo. Durante varios años, me sumergí completamente en este ritmo vertiginoso mientras trabajaba en la bolsa de valores. Todo giraba en torno a cifras, gráficos y decisiones de alto riesgo. Al principio, el desafío era emocionante. Sin embargo, con el tiempo, la intensidad me pasó factura. No solo me sentía agotada físicamente, sino que también comencé a cuestionarme el propósito de lo que hacía. Así fue como llegué al llamado burnout.

El síndrome de burnout, definido por la Organización Mundial de la Salud como un fenómeno relacionado con el estrés crónico en el trabajo, no solo afecta el rendimiento, sino también la salud física y emocional. Para mí, fue un punto de inflexión. Esa sensación de agotamiento extremo me obligó a detenerme y reflexionar. Empecé a preguntarme: si yo, como persona, podía llegar a este nivel de agotamiento por mantener un ritmo insostenible, ¿Qué estaba pasando con el planeta? ¿Qué pasa cuando llevamos nuestros recursos naturales al límite sin considerar las consecuencias a largo plazo?

Esa conexión entre el burnout personal y el desgaste ambiental fue reveladora. De repente, todo cobró sentido: la sostenibilidad no era solo un tema ambiental, era un tema profundamente humano. Así comenzó mi transición de un mundo enfocado únicamente en el rendimiento financiero a uno en el que la sostenibilidad se convirtió en mi principal propósito. Dejé atrás la bolsa de valores y me comprometí a trabajar en iniciativas que promuevan un equilibrio entre los objetivos empresariales y la responsabilidad ambiental y social.

Hoy en día, dedico mi tiempo y energía a ayudar a empresas a comprender que la sostenibilidad no es una carga adicional, sino una oportunidad para innovar y prosperar en un mundo cada vez más consciente. Me apasiona mostrar que el cambio no solo es necesario, sino que también puede ser beneficioso, tanto para las empresas como para el planeta.



¿Estamos dispuestos a cambiar nuestro enfoque y priorizar un modelo empresarial que no solo sea rentable, sino también respetuoso con nosotros mismos y nuestro entorno?